jueves, 31 de diciembre de 2015

domingo, 27 de diciembre de 2015

El místico sólo gradualmente va adquiriendo conciencia de la facultad que ha recibido para distinguir la franja indefinida y común de las cosas con más intensidad que su núcleo individual y preciso.


Durante mucho tiempo, creyéndose semejante a los demás hombres, trata de ver como ellos, de hablar su lenguaje, de sacarle gusto a las alegrías que les satisfacen. Durante mucho tiempo, con el fin de aquietar la misteriosa necesidad de una plenitud cuyo influjo le asedia, trata de derivarla hacia algún objeto particularmente estable o precioso, al que, en medio de los goces accesorios, se aferran la sustancia y la plenitud de la delectación.


Durante mucho tiempo pide a las maravillas del arte la exaltación que da acceso a la zona, su zona propia, de lo extrapersonal y de lo suprasensible, y trata de hacer palpitar, en el Verbo Desconocido de la Naturaleza, la Realidad superior que le llama por su nombre…



Feliz quien no haya logrado sofocar su visión…

Feliz quien no sienta temor de interrogar apasionadamente sobre su Dios, y sobre las Musas, y sobre Cebeles… 



Pero feliz, sobre todo, quien, superando el dilentantismo del arte y del materialismo de las capas inferiores de la Vida, haya oído que los seres le responden, uno a uno y todos en conjunto: “Lo que tú has visto pasar, como un Mundo, detrás del cántico, detrás del color, detrás de los ojos, no está aquí ni allí: es una Presencia extendida por todas partes. Presencia vaga todavía para tu vista débil, pero progresiva y profunda, en quien aspira a fundirse en toda diversidad y toda impureza”.

 Teilhard de Chardin, Himno del Universo, XI, p.86

martes, 1 de diciembre de 2015

Bendición de Iconos :: grecomelquitasenargentina

Bendición de Iconos :: grecomelquitasenargentinahttp://angelo-iconos.blogspot.com.ar

BENDICIÓN DE ICONOS

Damos Gracias a Dios porque nos permitió concluir la tarea que confió a nuestras manos este año. Con sencillez de corazón presentamos y retornamos a El, todo lo que El nos dió. 

Después de celebrada la Sagrada Eucaristía, Mons. Ibrahím bendijo con profunda unción los iconos de Nuestro Señor y de la Anunciación, invitándonos con su ejemplo y su palabra a valorar y venerar estas sagradas imágenes.
Qué bien supo decirlo Mons. Ibrahím: "los elementos de la naturaleza: lo mineral, lo vegetal, lo animal y lo humano se reunen en los Iconos para Alabar al Creador de todo". "Toda la Creación alabe al Señor!"




El regocijo por los dones espirituales fue completado por la calidez de la acogida de Monseñor y de la comunidad parroquial, por sus atenciones de Padre dedicándonos largo tiempo en sabrosa conversación cuando ya estuvo acabada la bendición. No lo decíamos, pero no queríamos irnos, estábamos junto a una fuente de sabiduría de la que costó apartarse. 

Si agradecidos llegamos al Templo San Jorge, muchísimo más agradecidos y gozosos nos retiramos de él llevando en nuestros corazones un gran estímulo para continuar la misión de anunciar el Evangelio a través de los colores.

Bendito sea el Señor!



Iglesia Católica San Jorge - Rosario